La Eurocopa 2012 ya tiene dueño, y no es otra sino España, la roja pasó por encima de Italia como quién pasa por encima de un esquinero, sin piedad, mostrando lo mejor del repertorio de tiki taka, todos los miedos se esfumaron en apenas 6 minutos de juego, dónde el canario Silva a pase de Cesc, abrió lo que sería el resultado más abultado en una final de Eurocopa, todo un 4-0, al filo del descanso Jordi Alba dejaría el marcador en 2-0.
Los italianos a la deriva mientras el mundo asistía al recital de fútbol orquestado por la roja, y para colmo de males Motta se lesiona apenas salir al terreno de juego y deja a su equipo con diez sobre el campo al haberse agotado todos los cambios de los trasalpinos, Torres no perdonó y clavó el 3-0 pudiendo marcar el cuarto que generosamente le cedió a su compañero en el Chelsea, Antonio Mata, y así de Kiev al Olimpo del fútbol, España entra en la leyenda.