Sin duda el sofá es un tipo de asiento sugerente, atractivo y confortable siempre y cuando hablemos de un buen sofá. Por su dimensión, y presencia contundente se convierte en el centro vital de las salas de estar, por lo que resulta fundamental elegirlo bien. Hay que conocer hacia dónde van los sofás modernos.
Diseños de sofás
Con el paso de los años los sofás han cambiado de manera sustancial tanto en su diseño como en funcionalidad. Los muebles pesados, estáticos y ostentosos que caracterizaron durante muchos años los estilos decorativos de líneas clásicas fueron relegados para dar paso a piezas modulares multifuncionales, de acabados rectos y limpios con módulos que se acoplan para prestar mejor, servicios y proporcionar mayor comodidad. Varias de las propuestas actuales en materia de sofás incluye una chaise-longue, un puf y una o dos poltronas reclinables con accesorios para apoyar los pies y sistemas de masaje.
Algunas incorporan también bolsas para guardar libros o revistas, bases o mesitas o auxiliares para tener a la mano los vasos, espacio para almacenar debajo de los asientos y hasta auriculares para escuchar la música preferida.
Los nuevos conceptos presentan múltiples modelos, en muchos de los cuales han desaparecido los brazos para ofrecer la alternativa de agregar un módulo más cuando se requiera.
Materiales para unos sofás modernos
La calidad de los materiales con los que se fabrica o tapiza un sofá determina no sólo su buena presentación, sino su durabilidad. Por fortuna, la industria del mueble se actualiza en forma permanente y es evidente que las estructuras y el tratamiento de los materiales de las bases han tenido grandes mejoras. Los tejidos de última generación también son fabricados con alta tecnología, lo cual permite que el consumidor tenga acceso a telas más duraderas, seguras y resistentes a numerosos agentes que las pueden deteriorar.
Tejidos modernos para los sofás
En el mercado existe una gran variedad de tejidos resistentes al fuego o que retardan la combustión, algo que sin duda alguna es un aporte significativo para aumentar los factores de riesgo en la casa. Adicionalmente, la aplicación de sustancias químicas especiales (resinas, siliconas, etc.) otorga a los hilados virtudes prácticas como resistencia a las manchas y a la humedad o a la acumulación de polvo. Otros tratamientos los protegen contra ácaros, hongos y bacterias, la formación de motas, el ataque de insectos y hasta de factores como la electricidad estática.
Sofás modulares, sofás convertibles
El hecho de que los diseños actuales ofrezcan mayores posibilidades para organizar con acierto el salón principal o las salas complementarias de una casa, no significa que los sofás de corte tradicional estén mandados a recoger. Un mueble bien conservado y cómodo, por antiguo que sea, siempre será bien recibido en cualquier estancia, con mayor razón si el ambiente decorativo sigue las líneas clásicas o eclécticas. Sin embargo, los sofás modulares tienen considerables atributos en funcionalidad y la variedad de sus formas facilita una excelente distribución en los espacios. Por ejemplo, los sofás en “L” son ideales para aprovechar las áreas esquineras, mientras que los de forma circular resultan perfectos para recintos espaciosos, ya que minimizan la necesidad de instalar muebles adicionales, lo cual sería indispensable si se optara por un sofá recto.
Cuando se trata de modelos con chaise-longue con respaldos reclinables es importante dejarles suficiente área libre a su alrededor para no impedir el flujo normal de circulación.
Los sofás modernos y actuales dan prelación a las propuestas modulares, al estilo asiático, a los toques brillantes y elementos metálicos.