Para llevar a cabo una lectura de cartas satisfactoria, es importante tomar en cuenta que la intuición está profundamente relacionada con el tarot, siendo ambos esenciales para poder realizar la interpretación del mensaje.
Mucha gente tiene la duda de cómo empezar en el mundo del tarot, qué baraja es la más indicada, y cuál es la forma para echar las cartas adecuadamente. Más allá de los cursos o manuales que se pueden encontrar al respecto, uno de los elementos fundamentales en el proceso de adivinación es la intuición. Ésta representa una potente herramienta para poder acceder al mundo espiritual, generando un camino para hallar una respuesta nítida en función a la consulta efectuada.
Por tanto, la intuición juega un papel muy importante en el tarot, siendo básicamente inseparables. Todo tirada de cartas debe interpretarse de manera intuitiva, solo tomando en cuenta las simbologías y lo que éstas transmiten, dejando de lado el mundo superficial, olvidando aquellos conocimientos que solo nublan la conexión con la fuerza mayor a la cual deseamos acceder.
Ante cualquier tipo de pregunta, el tarotista se ve en la necesidad de guiar su videncia usando las cartas de tarot, por eso tiene gran relevancia el haber escogido una baraja con la que se sienta a gusto. Ya sea de tipo egipcio o gitano, una baraja española o de Marsella, lo más recomendable es elegir aquella que complemente mejor sus capacidades.
En conclusión, si bien la intuición y el tarot se tienen que entender como dos caras de una misma moneda, que mutuamente se complementan para formar un todo. También se deben incorporar aspectos como el conocimiento y la inspiración. Cuando los tarotistas profesionales usan la intuición en la lectura de tarot, es esencial sintonizar la psique con el cuerpo, de esa forma se manifiesta la armonía necesaria para acceder a la videncia.