Entre el equipamiento para conducir motocicletas, el casco es el elemento de mayor importancia, ya que es el que le va a dar resguardo a nuestra cabeza y rostro, por lo que es necesario escoger uno que sea de buena calidad.
Es en estos casos en los que economizar no es muy conveniente para nuestra seguridad, dado que los cascos más baratos no ofrecen la protección necesaria. Existen algunos detalles que diferencian un casco de baja calidad con el mejor tipo de casco para conducir motocicleta.
El tipo de casco
Entre los tipos de cascos existentes en el mercado, los más seguros son los cascos integrales, mientras que los que menos protección brindan son los de tipo abierto. La conveniencia de usar un casco integral radica en la protección que brinda tanto a la cabeza como al rostro.
Material de fabricación y el tipo de correa
Los materiales usados en la fabricación de un casco también son un factor importante para la seguridad. Los de policarbonato o resina termoplástica son los más baratos pero también los más inseguros, ya que es un material que se vence rápidamente. Los cascos de carbono y kevlar son los de gama alta, que ofrecen gran resistencia y son bastante ligeros.
La correa es la que garantiza la sujeción del casco a la cabeza; y aunque pueda resultar molesto, las correas con doble hebilla se ajustan con mayor efectividad a nuestro cuello. Es un detalle del que hay que estar muy pendiente, por muy insignificante que parezca.
Superficie irregular
Existen cascos que como ornamento poseen protuberancias y alerones que pudieran resultar inconvenientes. La superficie lisa de un casco permite que a la hora de una caída se deslice contra el pavimento, sin ofrecer ninguna resistencia que pudiera ocasionar una torsión en la cabeza. Mientras más liso sea el casco, mejor para tu seguridad en caso de un accidente.
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