La Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) es un enfoque que aborda las emociones disfuncionales, el comportamiento y los procesos cognitivos basándose en una combinación de principios y técnicas conductuales y cognitivas básicas. La TCC es una estrategia centrada en el problema y orientada a la acción que los terapeutas utilizan para ayudar a los pacientes a abordar problemas específicos como la ansiedad, la depresión e incluso problemas psiquiátricos más complejos.
La terapia cognitivo-conductual hace referencia a una serie de métodos estructurados de psicoterapia que se centran en los pensamientos que subyacen a los problemas del paciente. Una encuesta realizada a cerca de 2.300 psicólogos en Estados Unidos reveló que alrededor del 70% utiliza la TCC en combinación con otras terapias para tratar la depresión y la ansiedad. La TCC es también un paradigma de psicoterapia predominante que se enseña en los programas de postgrado de psicología.
Cómo funciona la terapia cognitivo-conductual
La terapia cognitivo-conductual se basa en la idea de que los seres humanos son algo irracionales y cometen muchos errores ilógicos cuando evalúan los riesgos y beneficios de diversas situaciones y cursos de sus pensamientos y acciones. Esto puede conducir a emociones fuera de control, como la ira y la depresión. Pero la TCC también se utiliza para tratar una variedad de problemas más complejos, como el Trastorno de Estrés Postraumático (TEPT), el TOC, el abuso de sustancias, el TDAH, los trastornos alimentarios y el trastorno bipolar, entre otras enfermedades.
Los terapeutas cognitivo-conductuales de A tu lado Salud deben tener una buena relación con sus pacientes para que sea eficaz, como una buena capacidad de comunicación y una buena coincidencia en los tipos de personalidad. Esto se debe a que el paciente y el terapeuta trabajan juntos para discutir los temas en cuestión y los razonamientos del paciente para sus pensamientos y acciones hacia esos temas. el objetivo final es cambiar los patrones de pensamiento para que el paciente pueda experimentar menos estados emocionales crónicamente negativos.
La investigación sobre la eficacia de la TCC ha resultado ser efectiva para una amplia gama de trastornos. Estos estudios están bien controlados, los datos están suficientemente analizados y los resultados hablan por sí mismos. Por ejemplo, se ha descubierto que la TCC proporciona ventajas significativas en el tratamiento del trastorno bipolar y que da lugar a menos días de hospitalización, menores tasas de suicidio y menores tasas de conductas para-suicidas o autolesivas.
Precauciones que deben tomarse antes de iniciar la terapia cognitivo-conductual
Los psiquiatras, los psicólogos clínicos, los trabajadores sociales y otros profesionales de la salud mental completan años de formación y educación, sin embargo, es posible practicar la terapia sin una formación tan sólida. Algunos aspectos que hay que investigar antes de decidirse por un profesional de la TCC son la formación y los estudios, así como las asociaciones profesionales a las que pertenece, como la Asociación de Terapias Conductuales y Cognitivas, de la que son miembros la mayoría de los mejores terapeutas.
Antes de acudir a su primera cita, compruebe sus antecedentes, su formación, su certificación y su licencia. Psicoterapeuta suele ser un término general. Asegúrese de que el terapeuta que elija cumpla con los requisitos de certificación y licencia del estado para su disciplina particular. La clave es encontrar un terapeuta capacitado que pueda adecuar el tipo y la terapia a sus necesidades. En la mayoría de los casos, la TCC es más eficaz cuando se combina con otros tratamientos, como la toma de medicamentos. Así que, además del terapeuta, es posible que también necesites un psiquiatra para que te prescriba los medicamentos.
Otro aspecto a tener en cuenta es el coste. Si tienes un seguro médico, averigua qué cobertura ofrece para las sesiones de terapia. Algunos planes de salud sólo cubren un determinado número de sesiones de terapia al año. Algunos pueden no estar cubiertos en absoluto. Por lo tanto, asegúrese de hablar con el terapeuta sobre los honorarios y las opciones de pago antes de su primera visita.