Cuando se trata de la comodidad de cualquier espacio, uno de los elementos principales es la temperatura, especialmente en las épocas más frías donde se requieren espacios o ambientes cálidos. En este caso se hace imprescindible modificarla y esto es posible a través del uso de las calderas de calefacción a gas.
Estos son depósitos en la mayoría de casos de metal, que aportan calor y calientan el agua, usando el gas como un combustible. Este tipo de calderas de calefacción representan algunas ventajas, por ejemplo su funcionamiento es bastante rápido y ocupan poco espacio, además se puede adaptar con facilidad a cualquier ambiente.
Asimismo, cuentan con un termostato y un contador, es decir que es posible programar la temperatura según las preferencias personales, así como también regular el consumo. En cuanto a su vida útil, esta es más larga que otros tipos de calefacción. Cabe destacar, que no emiten residuos, siempre y cuando sean de gas natural, así que la limpieza no representa algún problema.
También es importante precisar que las calderas de calefacción a gas se deben revisar de forma periódica, por ejemplo para evitar cualquier tipo de fallas o daños, así como también garantizar la seguridad de todos y alargar aún más la vida útil del dispositivo.
Entre otras cosas, las calderas a gas Saunier Duval pueden ser atmosféricas y estancas, las primeras poseen un funcionamiento más simple y toman el aire del mismo espacio, aunque no se pueden usar en baños o habitaciones y la lluvia y el viento interfieren en su trabajo.
En cuanto a las calderas estancas, son más seguras y se pueden emplear en cuartos de baño y habitaciones, ya que poseen un tubo por donde toman el aire del exterior y expulsan el humo. En este caso, no importan la lluvia o el viento.