Hay una época en la vida de las mujeres, que se considera la mejor, se encuentra después de los 30 o incluso 40 años. La madurez, la seguridad y en muchos casos la independencia económica, hacen de esta etapa de la vida, la más productiva y llena de logros tanto personales como profesionales.
Pero, lamentablemente no todo es color de rosa, el paso de los años suele dejar sus huellas, y es en está época que comienza a notarse. Aunque con ejercicio y una buena alimentación se puede lograr una figura envidiable a la edad que sea, hay algo que es más dificil de evitar: las arrugas.
Existen cremas y tratamientos especiales para evitar la aparición de este problemita, en otro momento veremos algunos. Pero, cuando ya estan ahi, nada mejor que el famoso Botox®.
A continuación algunos mitos sobre el uso de este producto:
Pierdes la expresión y no puedes gesticular. Este producto, actúa relajando temporalmente el músculo al que se aplica. Es de esta manera que reduce las arrugas de expresión. Si es aplicado correctamente, en lugar de perder la expresión, lo que hace es refrescar el rostro, haciéndolo lucir saludable y descansado.
Una vez que se van los efectos, uno queda peor de lo que estaba. El efecto no es inmediato, se ve un cambio a las 48 o 72 horas, pero el resultado final recién a los 15 días. La duración de la aplicación es de 4 a 6 meses, luego se vuelve al estado anterior; con la ventaja de que como los músculos estuvieron relajados, durante este tiempo se impidió que se profundicen las arrugas existentes y se formen nuevas.
Rellena los labios. No rellena ni se aplica en los labios. Esto se hace con silicona o relleno de ácido hialurónico SURGUDERM que los mantiene más naturales y es reabsorbible. Botox se aplica en la frente, entrecejo y patas de gallo.
Hay distintas calidades de botox. Botox es una marca de toxina botulínica. Existen otras marcas, pero Botox es la única aprobada por la FDA. Es importante pedirle al médico que te muestre el producto que te esta aplicando.
No se puede aplicar muchas veces, porque es una toxina. No tiene efectos colaterales. Sólo se da en el 1% de los casos, y son leves, localizados y temporales, como enrojecimiento, hematoma o dolor de cabeza. Tiene uso terapéutico en dosis muchos mayores que las cosméticas e incluso en niños, por lo que no representa riesgos.
Foto vía: Brisbane Times