La decoración de cada ambiente es unos de los aspectos más importantes para convertir una casa en un hogar. Define su estilo, su modo de vida, sus gustos y preferencias. Por eso es primordial elegir los elementos ideales, que sean llamativos pero combinen entre ellos, y tratar de generar equilibrio y armonía. Entre las partes más relevantes en la decoración de interiores están las paredes y el color que poseen.
Por otro lado, pintar uno mismo las paredes es sumamente gratificante, ya que el resultado final será producto de su esfuerzo y habilidad. Pero si uno quiere realizar esa labor, es muy importante saber cómo pintarlas para que tengan un acabado profesional.
El primer paso para lograr un buen acabado es seleccionar la pintura adecuada. Existen muchas marcas disponibles en el mercado, y cada una ofrece características particulares; ya sea en el tipo de lustre o las propiedades de mantenimiento que tengan. Otro aspecto que debe ser tomado en cuenta es en qué superficie se piensa pintar. Lo más recomendable es tener toda esa información apuntada, y consultar a uno de los asistentes de ventas que se pueden hallar en las tiendas especializadas.
Obviamente deberá adquirir todos los implementos necesarios para poder llevar a cabo el pintado de las paredes. Consulte qué brochas y rodillos son los mejores, quizá gaste un poco más de lo previsto, pero si son de buena calidad, de seguro le ahorrarán tiempo y reducirán el consumo de pintura. Además que serán más duraderos, pudiéndolos usar nuevamente en futuras ocasiones.
Antes de comenzar a pintar asegúrese de preparar todo el lugar. Proteja los pisos para que no se machen en un descuido, mueva los muebles u otros elementos que puedan ser dañados, y limpie las paredes profundamente para que la pintura se aferre mejor a la superficie.
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