Los lectores son un aspecto muy frágil de diferentes dispositivos electrónicos, desde reproductores de música hasta consolas de videojuegos. Muchas veces estos lectores quedan sucios por el uso y hay que tener mucho cuidado al limpiarlos para no romperlos pero conseguir un rendimiento similar al original.
Para aprender a limpiar lentes hay que tomar en cuenta distintas recomendaciones, y una vez que tengamos todas las herramientas podemos intentar por nuestros propios medios limpiar la lente de la PlayStation o de nuestro lector de CD para el auto.
Lo primero es notar cuando el lente está empezando a fallar. Lo más normal es escuchar que se fuerza la lente para leer el disco o encontrar errores de lectura frecuentes. También el rechazo de algunos CD o DVD es señal de que la lente necesita ser limpiada.
La mejor forma de limpiar un lente es abrir el dispositivo y con un palito con alcohol retirar la suciedad. Cada lector es diferente y requiere un mecanismo diferente para acceder él, pero nunca es demasiado complicado ya que la estructura de los lentes suele estar siempre en la misma posición.
Con un bastoncillo de algodón vamos arrastrando la suciedad y limpiamos el lente para conseguir una mejor lectura. Podemos limpiar la lente pasando hasta que se seque el alcohol pero no hay que presionar demasiado porque suele ser un dispositivo muy sensible.
El lente es indispensable para la gran mayoría de dispositivos electrónicos de entretenimiento. El mecanismo se utilizan tanto en la vieja PlayStation para leer CD hasta los nuevos reproductores de Blu-Ray. Con cuidado se pueden limpiar los lentes y ahorrar dinero.
Una advertencia: los productos de limpieza automáticos que se venden en diferentes lugares de electrónica suelen ser peores para el dispositivo ya que pueden rayar el lente.