La fibra óptica poco a poco ha conseguido hacerse con un importante hueco en el mercado de las conexiones a Internet. El ADSL ha sido durante muchos años el rey absoluto de las conexiones de red, y los 20 o incluso 30 megas que ofrecía eran más que suficientes para utilizar Internet con normalidad. Pero ahora, con la llegada de la fibra óptica, las velocidades que se pueden conseguir alcanzan los 100, los 200 y dentro de algún tiempo incluso los 300 megas. Y no es solamente la velocidad lo que caracteriza a la fibra óptica, sino que también hay que tener en cuenta su efectividad del 100% en lo que a transferencia de velocidad por cable se refiere.
Pero la instalación de la fibra óptica en grandes edificios no se limita solamente a la introducción del cableado en las oficinas. También resulta fundamental que la empresa encargada de la instalación tenga los recursos suficientes como para mantener la instalación de fibra óptica ofreciendo un buen servicio que evite cualquier caída. Hay que recordar que una caída en una red doméstica solamente ocasiona algunas molestias, pero en cambio, una caída en una gran empresa -aunque solamente se trate de una caída de un par de minutos- genera pérdidas millonarias que nadie está dispuesto a asumir.
Por ello, a la hora de elegir una empresa para la instalación de fibra óptica hay que tener en cuenta multitud de factores. El precio es el aspecto menos importante en la elección, ya que de nada sirve ahorrar dinero durante la instalación si después la fibra óptica generará problemas a los empleados. Una empresa seria debe disponer de Internet durante las 24 horas del día, por lo que resulta fundamental recurrir a unos profesionales de confianza en el momento de otorgarles la responsabilidad de instalar la fibra óptica de todo el edificio.